Don't Knock Twice - James Edward Barker & Steve Moore

 

No es fácil encontrar películas de terror que sean realmente excepcionales. Desafortunadamente, Don’t Knock Twice solo nos indica que tenemos que seguir buscando. No voy a negar que tiene sus momentos de brillantez; los movimientos de cámara, la música, algunos encuadres y una actuación dedicada por parte de las dos actrices principales, son algunos que tratan de sacar a flote lo que es, en ultimas, un guion pobre e incoherente. La trama es forzosa al igual que las conclusiones a las que llega, lo que a su vez pareciera decirnos que la película solo buscaba excusas para sacarnos algunos sustos. Y si, puedo afirmar, a ratos lo logra.

La música estaba a cargo de James Edward Barker en colaboración con Steve Moore. Ambos compositores poco conocidos cuyo trabajo previo sigue la línea de películas de terror, suspenso y crimen. No me queda duda de que saben qué hacer en producciones de este género. En este sentido, la música es un elemento central en Don’t Knock Twice, siendo el complemento que lleva la tensión entre el personaje y el suceso a su máximo punto; ese momento antes de que uno salte de la silla. Sus recursos, la mayoría del tiempo, son tonos agudos y sintéticos que se mezclan de forma natural con esa atmosfera pesada de la película

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El trabajo de Barker siempre está reiterando lo delicada y peligrosa que es la situación de la madre y su hija (personajes principales de la producción), pero es en los instantes previos o el durante de los ataques del demonio, donde este sale a relucir: escenas donde la pantalla se inunda de timbres agudos y reiterados que incomodan al espectador.